Poesías y tribulaciones

[Llamando a las puertas]

Volverme
del otro lado,
¿si abro la puerta
y estás?
Me levanto
y camino dormido,
te reconozco
porque te quiero ver.

Siento frio
y abrio ventanas,
¿si no fuera nada más
que un sueño?
Suena el timbre,
salto,
y te doy
el poema.

Sin cobardía
muestro turbación,
salgo de esta casa,
veo luz,
y en el fondo
otra vez tú,
¿si supiera
quién hay detrás?

Ni siquiera
hay que buscarte
al tacto desapareces,
me reclamas
con tus nanas,
y solo tú
sabes dónde buscarme.

Pierdo los aromas
y los colores,
precavido acercándome
-no fiarse de uno mismo-
te veo
sentada frente a mí,
de repente
no dejasde caer.

Guardas tu risa
para otro día,
puedo negar
que no es verdad,
entrar por aquí
y salir,
recordarte
sin poder impedirlo.

No hay verdadera paz,
mientras haya resistencia,
dudas
o problemas,
no hay sueño en la luz.

Llamo a la puerta,
y nadie me abre.
Tú
no estás.